Seúl, 27 de junio (Yonhap) — El principal enviado nuclear de Corea del Sur se reunió, este lunes, con un alto funcionario del Departamento del Tesoro de EE. UU. a cargo de sancionar a Corea del Norte y a quienes apoyan sus programas de armas de destrucción masiva.
Las consultas entre Kim Gunn, representante especial para asuntos de paz y seguridad de la península de Corea en el Ministerio de Relaciones Exteriores, y Brian Nelson, subsecretario de terrorismo e inteligencia financiera, en Seúl se produjeron en medio de especulaciones de que Pyongyang podría llevar a cabo pronto una prueba nuclear. Nelson dirige la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro, que administra y hace cumplir muchos programas de sanciones estadounidenses.
«Las dos partes compartieron la misma opinión de que el desarrollo del programa nuclear y de misiles de Corea del Norte solo conducirá a una mayor disuasión por parte de Corea del Sur y Estados Unidos y a su mayor aislamiento de la comunidad internacional», dijo el ministerio de Kim en un comunicado de prensa.
Acordaron que Corea del Norte enfrentará sanciones internacionales más duras si se niega a aceptar las ofertas de diálogo y continúa con los actos de provocación, agregó.