El primer ministro japonés, Fumio Kishida, asumió el cargo en octubre pasado con la promesa de un “nuevo capitalismo” para poner fin a la deflación y mejorar los niveles de vida. Diez meses después, la empresa ya parece bastante antigua.
El problema: el Partido Liberal Democrático (PLD) de Kishida está apostando a un aumento de 31 yenes por hora a $0.23 míseros en el salario mínimo. Es una táctica que no es ni nueva ni particularmente capitalista ni probable que catalice el círculo virtuoso de la creciente demanda de los consumidores que Tokio ahora necesita desesperadamente.
Sin duda, tiene mérito aumentar el salario mínimo por hora de los 961 yenes actuales, o $7,20, durante el año fiscal actual que finaliza en marzo de 2023. Sin embargo, dos grandes preocupaciones ya están socavando lo que el partido de Kishida está convirtiendo en un logro histórico.
https://asiatimes.com/2022/08/kishidas-new-capitalism-old-wine-in-a-stale-bottle/
Categoría: Japón