Rusia se está preparando para montar una gran ofensiva en los primeros meses de 2023.
La declaración relevante fue hecha por el Ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, hablando con los periodistas desde un refugio antibombas en el centro de Kiev, informa un corresponsal de Ukrinform, refiriéndose a El globo y el correo.
Según Kuleba, Rusia no ha podido recuperar el impulso después de que las fuerzas ucranianas recuperaran el control de Kherson en noviembre. Pero Putin insistirá en un gran avance en breve.
“Creo que la capacidad rusa para llevar a cabo una gran ofensiva puede restaurarse en algún lugar a fines de enero o febrero, pero eso es lo que están tratando de hacer. En el mejor de los casos [for Russia]teniendo en cuenta la movilización, el reclutamiento que han anunciado y el entrenamiento de nuevos reclutas y el movimiento de armas pesadas en todo el país, definitivamente todavía tienen la esperanza de poder romper nuestras líneas y avanzar más profundamente en Ucrania”, Kuleba. dicho.
En sus palabras, la preocupación inmediata de Ucrania es restablecer la electricidad en todo el país, luego de seis ataques con misiles lanzados por Rusia desde el 10 de octubre de 2022.
«El objetivo [of Russia – Ed.] es destruir el sistema energético ucraniano y dejar a millones de personas sin acceso a electricidad, agua y calefacción en medio de temperaturas bajo cero. Putin espera que sin electricidad, agua y calefacción, los ucranianos dejen de resistir y acepten los ultimátum rusos, pero esto es un grave error de cálculo. El terror de los misiles rusos no derrumbará a Ucrania”, enfatizó Kuleba.
Kuleba llamó a una conferencia de ayuda en París para recaudar fondos de emergencia para ayudar a Ucrania a pasar el invierno como un “gran éxito”.
Kuleba admitió que Ucrania está agotando sus arsenales de armas de manera alarmante mientras continúan los ataques con misiles y artillería en ambos lados. Hizo un llamamiento no solo por los misiles de largo alcance, sino también por la artillería de campaña de 155 mm, que es uno de los pilares de las fuerzas terrestres de Ucrania tanto para la acción defensiva como para la ofensiva.
“El arma que más necesitamos son más obuses de 155 mm. Esta guerra es en gran parte una guerra de artillería, y Rusia aún domina en el campo de batalla por la cantidad de cañones que usa y la cantidad de proyectiles que disparan estos cañones”, señaló Kuleba.
Para ayudar a detener la esperada ofensiva rusa en enero o febrero, Ucrania necesita armas de 155 mm para destruir objetivos rusos en los territorios ucranianos ocupados, agregó Kuleba.
Foto: Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania
mk