El ministro de Asuntos Exteriores de Malí, Abdoulaye Diop, reiteró la salida irreversible de su país, Burkina Faso y Níger de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), a pesar de los esfuerzos de reconciliación del bloque.
Los líderes militares de Níger, Malí y Burkina Faso se separaron de la agrupación regional CEDEAO a principios de este año y formaron su propia confederación el sábado.
Los jefes de Estado de la CEDEAO se reunieron en Abuja un día después y designaron a los presidentes de Senegal y Togo como mediadores del diálogo con los tres Estados del Sahel.
Diop dijo que Mali seguía abierto a la cooperación con la CEDEAO durante una aparición el lunes por la noche en la emisora estatal ORTM.
Pero se pronunció en contra de la posible introducción de visados para los nacionales de los tres países que viajen dentro de la CEDEAO.
La decisión de los tres países de abandonar el bloque fue impulsada en parte por su acusación de que Francia estaba manipulando a la CEDEAO y no brindando suficiente apoyo a los esfuerzos antiyihadistas.
“Nuestros jefes de Estado fueron muy claros en Niamey cuando dijeron que la retirada de los tres países de la CEDEAO es irrevocable y se hizo sin demora, y a partir de ahora debemos dejar de mirar por el espejo retrovisor”, dijo Diop el lunes.
Malí sigue “abierto a trabajar con nuestros vecinos y otras organizaciones con las que compartimos este espacio”, añadió.
“Tendremos que mantener el diálogo con otros para poder avanzar, pero creo que el camino que hemos emprendido no es reversible”, afirmó.
Diop dijo que la creación de una confederación era sólo una etapa del proceso y agregó que “la visión es trabajar hacia una federación de los tres estados”.
La CEDEAO ha dicho que los tres países deben respetar un plazo de salida de un año, pero las juntas afirman que su retirada será efectiva “sin demora”.
La salida ha suscitado preocupación por las consecuencias que tendrá para la libre circulación de bienes y personas dentro de la región.
Si se reintroducen los visados, “tendremos razón en el sentido de que algunos funcionarios de la CEDEAO no han abandonado los viejos métodos de asustar y chantajear a la gente”, afirmó Diop.
En “un proceso de integración hay ganancias y pérdidas para todos, pero debemos trabajar para minimizar el impacto en nuestras poblaciones”, añadió.