Más importante aún, el daño ambiental atribuido al encallamiento de Sierre Madre en Second Thomas Shoal y las actividades humanas relacionadas en el área, según reclama China, parecen palidecer en comparación con el daño causado por la construcción de islas artificiales por los estados reclamantes en el Mar de China Meridional.
Un informe del CSIS señaló que, entre otras cosas, China ha causado la mayor destrucción de arrecifes mediante dragado y vertederos, enterrando aproximadamente 4.648 acres de arrecifes (equivalentes a más de 3.500 campos de fútbol), seguida de Vietnam (1.402 acres o más de 1.000 campos de fútbol), Malasia (83 acres o más de 62 campos de fútbol) y Filipinas (40 acres o más de 30 campos de fútbol).
No sorprende que China haya rechazado estos hallazgos por considerarlos infundados o verificables y haya destacado sus propios esfuerzos por proteger las especies marinas en el Mar de China Meridional. Pero lo cierto es que el daño causado por la construcción de islas artificiales por parte de China debilita sus afirmaciones de protección ambiental en Scarborough Shoal.
Como ambas partes no hablan entre sí, es poco probable que los informes de protección ambiental de China apacigüen las preocupaciones de Filipinas sobre la destrucción de la vida marina en el banco de arena Scarborough. Manila parece ansiosa por insistir en la cuestión de otro caso legal contra China, con el objetivo de generar una nueva ola de presión internacional sobre Beijing.
Lye Liang Fook es investigador principal del Programa de Estudios Estratégicos y Políticos Regionales del ISEAS – Instituto Yusof Ishak. Este comentario apareció por primera vez sobre ISEAS – Blog del Instituto Yusof Ishak, Fulcrum.