La UE exige que los estados miembros apliquen un impuesto especial mínimo a la cerveza, pero la mayoría de los países en realidad cobran más.
Los precios de la cerveza europea están complementados con fuertes impuestos, además del IVA, ya que la Unión Europea exige que los estados miembros cobren al menos 1,87 euros por 100 litros (26,4 galones).
El impuesto requerido se traduce en aproximadamente 0,0309 euros por una botella estándar de 330 ml (11,2 oz) de cerveza con un contenido de alcohol del 5%, pero sólo unos pocos países se mantienen cerca de esta tasa.
Según cifras recientes publicadas por el grupo de expertos Tax Foundation, con sede en Estados Unidos, Finlandia recauda la mayor cantidad de impuestos, 0,597 euros por botella de cerveza de 330 ml, seguida por el Reino Unido con 0,413 euros e Irlanda con 0,372 euros.
Por otro lado, el impuesto a la cerveza más bajo se aplica en Bulgaria, donde es de 0,0316 euros por botella de cerveza, seguida de Alemania con 0,0325 euros y Luxemburgo con 0,0327 euros.
No se deje engañar por las cantidades minúsculas. En Alemania, que ocupa el puesto 27 en el ranking, donde se consumen casi 80 millones de hL de cerveza al año, el impuesto mínimo europeo sobre la cerveza aportaría por sí solo unos ingresos anuales de 150 millones de euros al presupuesto.
El informe fiscal señala que algunos países varían su tasa impositiva según la fuerza de la cerveza en cuestión, y un mayor contenido de alcohol podría costar más por el mismo volumen.
para comparar precios reales de la cervezatambién se debe contar con el impuesto al valor agregado (IVA) en cada país, que es independiente del impuesto especial.
El impuesto sobre el alcohol es un tema importante en muchos países europeos. Algunos lo utilizan como herramienta para reducir el consumo de alcohol y disminuir sus efectos nocivos sobre la salud pública, mientras que otros priorizan reducir el impuesto para estimular la economía.
Mientras tanto, el impuesto europeo sobre las bebidas alcohólicas varía: la cerveza se grava menos que las bebidas espirituosas pero más que el vino, y varios países no imponen ningún impuesto especial al vino.
¿Qué ha cambiado desde el año pasado?
A partir del 1 de enero de 2024, varios países de la UE introdujeron ligeros cambios en su tipo del impuesto especial sobre la cerveza.
El estudio destaca sólo aquellos con más de 0,01 euros por bebida, como Francia, donde el coste aumentó de 7,82 euros a 7,96 euros por hectolitro y contenido de alcohol, lo que supone 0,04 euros más por bebida.
Estonia, Lituania y Letonia también aumentaron los impuestos sobre la cerveza en 0,01 €, 0,014 € y 0,013 € más por bebida, respectivamente.
Por otro lado, Finlandia redujo su impuesto especial sobre la cerveza de 38,05 euros a 36,20 euros por hectolitro en enero de 2024, lo que supone 0,03 euros menos por bebida.