El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) descubrió y arrestó a un oficial ucraniano de alto rango que supuestamente trabajaba como topo ruso, informó el SBU a través de su canal Telegram el 15 de noviembre.
Según el informeel oficial, comandante de una unidad de las Fuerzas de Operaciones Especiales, había estado transmitiendo inteligencia militar crítica a las tropas rusas.
La información filtrada incluía detalles sensibles sobre misiones de sabotaje y reconocimiento llevadas a cabo por fuerzas especiales ucranianas en los oblasts de Zaporizhzhia y Kherson y en la Crimea ocupada por Rusia.
Se informó que las fuerzas rusas estaban utilizando esta información de inteligencia para atacar a las Fuerzas de Defensa de Ucrania estacionadas en las líneas del frente y en las zonas ocupadas del sur de Ucrania.
El agente, cuya identidad no ha sido revelada, ha sido detenido y actualmente se encuentra bajo custodia.
Se enfrenta a cargos de traición y espionaje, que conllevan penas severas, incluida cadena perpetua y decomiso de bienes en caso de condena.
El sospechoso fue reclutado por la agencia de inteligencia militar rusa (GRU) antes de la invasión a gran escala de Rusia el 24 de febrero de 2022 y comenzó a recibir tareas en la primavera de 2024, según el SBU.
El mando de las Fuerzas de Operaciones Especiales de Ucrania confirmó la detención del comandante y dicho habían estado al tanto de las acciones investigativas respecto de este militar y “facilitaron plenamente su implementación”.
«Mientras los operadores de las fuerzas especiales realizan misiones de combate detrás de las líneas enemigas en territorios temporalmente ocupados, lamentablemente hay quienes intentan interferir desde el interior», añadió el comando.
“Las fuerzas especiales continúan cumpliendo tareas, destruyendo al enemigo y liberando el territorio ucraniano de los ocupantes. Y todos aquellos que piensen que pueden interferir con esto y poner en peligro las vidas de nuestros soldados quedarán expuestos y enviados tras las rejas”.
Esta no es la primera vez que el SBU descubre la infiltración rusa dentro de las filas ucranianas.
El 14 de agosto, descubrió una célula de inteligencia rusa que incluía a dos ex miembros del equipo de seguridad del ex presidente Viktor Yanukovich y un miembro activo de la Guardia Nacional de Ucrania.
De manera similar, el 27 de agosto arrestó a otro individuo en Kharkiv que estaba pasando información a las fuerzas rusas sobre los sistemas de defensa aérea de la ciudad y las posiciones de las tropas y fortificaciones ucranianas.