ECONOMÍA: LA RACIONALIZACIÓN DE LOS SUBSIDIOS COMO REFORMA SIGNIFICATIVA
Económicamente, Malasia logró mantener estables las cifras nacionales y al mismo tiempo atraer inversiones internacionales sin precedentes. La mejora del PIB, la inflación y las cifras de empleo apuntan a una economía en recuperación en medio de la incertidumbre y el declive global. En particular, las inversiones en inteligencia artificial, semiconductores y centros de datos han sido significativas y probablemente continuarán hasta 2025.
La principal cuestión que se plantean los analistas el próximo año será la racionalización de las subvenciones al petróleo, que se prometió en el presupuesto para 2025 y que se implementaría a mediados de 2025.
Esto es importante por varias razones. En primer lugar, la racionalización de los subsidios al petróleo es generalmente una cuestión muy emotiva, especialmente para un país productor de petróleo como Malasia, que durante mucho tiempo ha disfrutado de precios bajos.
En segundo lugar, el alcance de los compromisos de reforma del gobierno se reduce a esta cuestión: los gobiernos anteriores lo han intentado y han dado marcha atrás cuando se enfrentaron a un retroceso.
En tercer lugar, es quizás la última ventana para reformas difíciles antes de que el gobierno de unidad entre en el “ciclo electoral” de sus dos últimos años antes de las próximas elecciones generales.
Aunque Anwar ha reducido los subsidios relacionados con el diésel, la electricidad y ciertos alimentos, la racionalización del subsidio a la gasolina no se parece a ninguna otra, lo que presenta un desafío enorme para su administración.
Ha limitado la escala centrándose sólo en el 15 por ciento de los que más ganan, pero no se sabe qué impacto tendrá esto en la economía en general. Sin embargo, si supera esta prueba, habría logrado una hazaña que sus predecesores no pudieron.
Como economía dependiente del comercio, el resultado de Malasia en una guerra comercial entre Estados Unidos y China bajo Trump 2.0 depende de la profundidad y amplitud de esos aranceles. Si los aranceles aumentan al menos un 10 por ciento, entonces la relocalización a Malasia, como ocurrió en 2024, se acelerará a medida que más empresas busquen áreas geopolíticamente neutrales y geográficamente estratégicas con planificación a largo plazo. Sin embargo, si la amplitud de los aranceles es mayor, es decir, afecta a más productos, como ocurre con los equipos de semiconductores y paneles solares en Malasia, entonces el beneficio neto podría ser menor.