MANILA: Sacerdotes católicos filipinos presentaron el jueves (19 de diciembre) una denuncia de juicio político contra la vicepresidenta Sara Duterte, el tercer intento de derrocarla tras una explosiva disputa con el presidente Ferdinand Marcos.
Se esperaba que la mujer de 46 años sucediera a su padre Rodrigo Duterte en las elecciones de 2022, pero se hizo a un lado para respaldar a Marcos y luego se postuló para vicepresidente en su lista.
Pero antes de las elecciones de mitad de período del próximo año, su alianza ha implosionado públicamente. El mes pasado, pronunció una conferencia de prensa cargada de palabrotas diciendo que había ordenado a alguien que matara a Marcos si ella misma era asesinada.
Más tarde negó haber hecho una amenaza de muerte y describió sus comentarios como una expresión de «consternación» por los fracasos de la administración de Marcos.
Coaliciones distintas de activistas ya han presentado dos denuncias de juicio político ante el Parlamento. La tercera fue presentada el jueves por siete sacerdotes católicos radicados en Manila.
La acusó de «desembolsos anómalos» de millones de dólares como vicepresidenta y cuando dirigía el Ministerio de Educación -cargo que renunció en junio-, así como de planear el asesinato de Marcos.
«El juicio político es la última línea de defensa necesaria contra la corrupción en los niveles más altos de la burocracia», afirmó.
«Ella no puede ser vicepresidenta ni un minuto más».