El banco central de China ha montado una defensa más fuerte para el yuan y el mercado interno de divisas, mientras el país se prepara para el regreso de Donald Trump, quien se espera que traiga mayores obstáculos al comercio y al tipo de cambio.
El Banco Popular de China y la Administración Estatal de Divisas anunciaron conjuntamente el lunes un aumento del parámetro de ajuste macroprudencial para la financiación transfronteriza de empresas e instituciones financieras, de 1,5 a 1,75, una medida adoptada anteriormente para evitar que el yuan-dólar que el tipo de cambio empeore.
El financiamiento transfronterizo implica proporcionar financiamiento para actividades comerciales que ocurren fuera de las fronteras de un país, y el parámetro de ajuste determina el límite superior de dicho financiamiento permitido.
“Esta medida puede contribuir en cierta medida a aliviar la presión de la depreciación y aumentar la cantidad de financiación extranjera para las empresas. Si como resultado fluyen más dólares estadounidenses, ciertamente ayudará a estabilizar el yuan”, dijo Zhu Tian, profesor de economía de la Escuela Internacional de Negocios China Europa en Shanghai.
Pero Zhu dijo que el efecto estimulante puede ser limitado.