Cuando Ayat Salim, fanática del anime y la cultura geek desde hace mucho tiempo, se lanzó al cosplay, entró en un mundo de infinitas posibilidades.
Para Ayat, el cosplay era una forma de aliviar su soledad. Una vez reclusa, encontró confianza y conexión dentro de una vibrante comunidad de cosplay.
A medida que profundiza en la creciente escena geek de Qatar, su coraje y creatividad inspiran a otros.