La liga francesa ha prohibido a los aficionados de Lille y Marsella viajar a partidos fuera de casa durante el resto del año tras la violencia en los últimos partidos.
El comité disciplinario de la LFP emitió sus veredictos a la medianoche del miércoles, otorgando a cada club una deducción suspendida de un punto.
Lens vs lille hace un par de minutos !!!pic.twitter.com/hI33ZVNhTV
– Ahmed (@ Ahmeedamr14) 18 de septiembre de 2021
Lens también recibió una deducción de un punto suspendida y se le ordenó jugar dos partidos en casa sin fanáticos. Angers cerró una sección de su estadio durante dos partidos. Ambos clubes ya habían cumplido esos castigos, pero también se ordenó a Angers pagar una multa de 20.000 euros (23.000 dólares).
El mes pasado, unos 50 aficionados del Marsella corrieron al campo y se enfrentaron con sus homólogos de Angers en su tribuna en el pitido final.
Apenas unos días antes, los aficionados destrozaron los asientos y se los tiraron unos a otros en el entretiempo durante el derbi norte de Lens-Lille. El partido se interrumpió durante 30 minutos pero continuó.
En agosto, hubo un grave desorden en el partido Niza-Marsella, que fue suspendido y se volverá a jugar el 27 de octubre.
El problema problemático del desorden de los fanáticos en Francia resurgió el jueves pasado, cuando el partido de la Europa League entre Marsella y Galatasaray se interrumpió durante unos 10 minutos después de que los fanáticos rivales se lanzaran bengalas y petardos en el Stade Velodrome.