in

(EDITORIAL de Korea Times el 20 de mayo)

De la seguridad a la economía y la tecnología

El presidente Yoon Suk-yeol celebrará su primera cumbre con el presidente estadounidense Joe Biden en Seúl el sábado, lo que genera esperanzas de una nueva era de alianza entre los dos países. Los dos líderes están comprometidos a desarrollar la alianza de seguridad bilateral en una alianza estratégica integral para la economía y la tecnología.

La cumbre crucial se produce en medio de crecientes desafíos geopolíticos, incluidas las crecientes amenazas a la seguridad de Corea del Norte, la guerra rusa en curso en Ucrania y la creciente rivalidad entre las grandes potencias de EE. UU. y China. Todos estos factores negativos han hecho que tanto Seúl como Washington sientan la urgente necesidad de mejorar su alianza para garantizar la paz, la estabilidad y la prosperidad en la región.

Sobre todo, Yoon y Biden deberían elaborar medidas para reforzar la disuasión extendida contra los posibles ataques nucleares de Corea del Norte. Pyongyang ha seguido lanzando misiles balísticos, incluidos misiles balísticos intercontinentales. Según los informes, también está listo para reanudar su séptima prueba nuclear, a pesar de la rápida propagación de las infecciones por COVID-19. Los dos líderes deben tomar medidas sustanciales para incitar a Corea del Norte a avanzar hacia la desnuclearización y brindar ayuda humanitaria para ayudar al Norte a combatir el coronavirus.

El punto culminante de la cumbre será el anuncio oficial de Yoon sobre la decisión de Seúl de unirse al Marco Económico del Indo-Pacífico (IPEF) liderado por Estados Unidos, una nueva iniciativa para contrarrestar la creciente influencia de China. La participación de Corea dará un impulso a los muy reconocidos esfuerzos de Biden para crear sus propias cadenas de suministro globales para alejar a China de la red económica y comercial global.

Se espera que Corea del Sur se beneficie enormemente de su membresía IPEF. Puede allanar el camino para una alianza tecnológica que permitirá al país realizar otro despegue económico. El IPEF está diseñado para intensificar la cooperación en comercio, infraestructura, cadenas de suministro y tecnología con los aliados y socios de EE. UU. en la región del Indo-Pacífico. Biden tiene previsto anunciar el lanzamiento del IPEF durante la reunión cumbre del Diálogo de Seguridad Cuadrilateral, más conocido como Quad, que se realizará en Japón los días 23 y 24 de mayo.

Sin embargo, la presencia de Corea en IPEF no solo genera oportunidades, sino también desafíos para la nación. Significa que la política del país de depender de los EE. UU. para la seguridad y depender de China para el crecimiento económico puede que ya no sea sostenible. Seúl ha mantenido hasta ahora una «ambigüedad estratégica» para evitar tomar partido en medio de la competencia estratégica entre Washington y Beijing.

En este contexto, es inevitable que Corea se sume a la iniciativa económica estadounidense para garantizar su seguridad y maximizar sus intereses nacionales. Seúl ha comenzado a darse cuenta de que cada vez es más difícil hacer un acto de equilibrio entre los poderes del G2. Se puede decir que el país ha adoptado un enfoque realista en medio de la nueva Guerra Fría emergente entre la coalición liderada por Estados Unidos y la agrupación de China, Rusia y Corea del Norte.

Sin embargo, existe una creciente preocupación de que China pueda tomar represalias contra Corea del Sur por unirse a la alianza económica contra China. Cuanto más se acerque Seúl a Washington, mayor será la reacción que enfrentará desde China. El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, aparentemente protestó por la medida coreana en conversaciones por video con su homólogo de Corea del Sur, Park Jin, el martes. Hizo hincapié en la necesidad de que Seúl y Beijing se opongan a su posible «desacoplamiento» y mantengan estables las cadenas de suministro globales.

Por lo tanto, la administración Yoon debe hacer grandes esfuerzos para explicar claramente nuestras posiciones y persuadir a Beijing para que mantenga lazos económicos y comerciales de cooperación con Seúl. El gobierno debe hacer todo lo posible para evitar las posibles represalias de China, como se vio en el despliegue estadounidense de su batería antimisiles THAAD en suelo coreano. También debe asegurar a Beijing que la inclinación de Corea hacia Estados Unidos no afectará los intereses fundamentales de China. Esta es una prueba difícil para el presidente Yoon, quien prometió fortalecer la alianza Corea-Estados Unidos.
(FIN)

Fuente

Written by Redacción NM

(AMPLIACIÓN) El total de casos sospechosos de COVID-19 en Corea del Norte supera los 2 millones

(AMPLIACIÓN) El total de casos sospechosos de COVID-19 en Corea del Norte supera los 2 millones

Desafío de la Corte Federal ya que a los australianos con COVID positivo se les negó el voto

Desafío de la Corte Federal ya que a los australianos con COVID positivo se les negó el voto