VENEZUELA condenó la llegada de un buque de guerra estadounidense a la vecina Trinidad y Tobago, calificándola de “provocación” peligrosa en medio de temores de que Washington pueda estar preparando una invasión continental.
El USS Gravely, un destructor de misiles guiados, atracó en Puerto España para una visita de cuatro días que incluirá ejercicios de entrenamiento conjuntos con las fuerzas de defensa locales.
Según funcionarios de ambos países, el buque permanecerá hasta el jueves.
Trinidad y Tobago, un antiguo aliado de Estados Unidos, se encuentra a sólo 11 kilómetros de la costa de Venezuela.
Tal proximidad no ha hecho que aumentar las tensiones entre Caracas y Washington.
La visita de Gravely se produce tras el reciente despliegue del USS Gerald R. Ford, uno de los portaaviones grandes del mundo, en la misma región.
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CAMINO A LA GUERRA
El plan de la ‘Doctrina Donroe’ de Trump lo ha puesto al borde de la guerra con Venezuela
Ambos barcos forman parte de una campaña amplia lanzada por el presidente estadounidense, Donald Trump, contra presuntos narcotraficantes latinoamericanos.
Hasta ahora, la operación estadounidense se ha limitado a ataques marítimos, y las fuerzas afirman haber destruido al menos 10 barcos sospechosos de contrabando de narcóticos y matado a 43 personas desde septiembre.
Pero Trump ha insinuado que la campaña pronto podría trasladarse a tierra.
Esta es una posibilidad que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha descrito como un complot para derrocarlo del poder.
Los analistas han sugerido que esta demostración de fuerza representa una extensión moderna de la Doctrina Monroe, ahora rebautizada como la llamada “Doctrina Donroe”.
Alude a la política estadounidense del siglo XIX que justificó la intervención en todo el continente americano con el pretexto de proteger la estabilidad regional y los intereses estadounidenses.
El fiscal general venezolano, Tarek William Saab, un aliado cercano de Maduro, dijo que no había “ninguna duda” de que Trump está intentando derrocar al gobierno venezolano.
“Trump quiere convertir a Venezuela en una colonia del Reino Unido”, afirmó Saab.
Cuando se le preguntó sobre el riesgo de una invasión de tierras, dijo: «No debería suceder, pero estamos preparados».
Pese a esto, Saab insistió en que Venezuela sigue abierta a la diplomacia y agregó que el país “todavía está listo para reanudar el diálogo” con Estados Unidos, a pesar de lo que describió como su “lucha ilegítima contra el narcotráfico”.
En un comunicado, la vicepresidenta Delcy Rodríguez acusó a Trinidad y Tobago de coordinar con la CIA una “provocación militar destinada a provocar una guerra en el Caribe”.
Las autoridades venezolanas dijeron que habían arrestado recientemente a un grupo de mercenarios presuntamente conectados con la CIA, pocos días después de que Trump autorizara operaciones de seguridad encubiertas.
Ade, alegaron que “se está llevando a cabo un ataque de bandera falsa”, aunque no proporcionaron detalles.
Una “bandera falsa” se refiere a una operación diseñada para hacer que una parte parezca responsable de un acto realizado por otra.
Caracas ha hecho acusaciones similares antes, la reciente en octubre, cuando afirmó que Estados Unidos planeaba colocar explosivos en su embajada en Caracas.
La primera ministra de Trinidad, Kamla Persad-Bissessar, crítica abierta de Maduro, defendió la visita del destructor estadounidense.
Dijo que la presencia del USS Gravely «tiene como objetivo reforzar la lucha contra el crimen transnacional y generar resiliencia a través de capacitación, actividades humanitarias y cooperación en materia de seguridad».
Agregó que Trinidad y Tobago valora su relación “con el pueblo de Venezuela” y sigue comprometida con “la creación de una región segura, fuerte y próspera”.
Caracas, sin embargo, ha acusado a Trinidad de servir efectivamente como un “portaaviones estadounidense” en el Caribe.
Trinidad y Tobago se ha convertido en un centro clave del tráfico de drogas en el Caribe, y varios de sus ciudadanos ya han quedado atrapados en la campaña estadounidense.
Según informes, dos hombres de Trinidad murieron en un ataque estadounidense a un barco que había partido de Venezuela a mediados de octubre.
Sus familias afirman que los hombres eran pescadores, no contrabandistas, aunque las autoridades locales aún no han confirmado sus muertes.
Algunos residentes temen que las crecientes tensiones puedan arrastrar a su nación a un conflicto.
«Si algo sucediera con Venezuela y Estados Unidos, nosotros, como personas que vivimos en las afueras… podríamos terminar recibiendo un azote en cualquier momento», dijo Daniel Holder, de 64 años.
«Estoy en contra de que mi país sea parte de esto».
Estados Unidos se encuentra entre varias naciones que se niegan a reconocer a Nicolás Maduro como presidente legítimo de Venezuela.
Esto sigue a las elecciones de 2024 que fueron ampliamente descartadas por no ser libres ni justas.
Según Saab, el verdadero objetivo de Washington es un cambio de régimen para apoderarse de los recursos naturales de Venezuela, incluidos el oro, el petróleo y el cobre.
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Miembros del Congreso estadounidense –de ambos partidos– han cuestionado la legalidad de los ataques militares de Trump y si tiene autoridad para ordenarlos.
Mientras tanto, Trump ha calificado a Maduro de “líder de una banda del crimen organizado”, aunque no ha proporcionado pruebas que respalden esa afirmación.
¿Qué es la Doctrina Donroe?
- La Doctrina Donroe es una versión moderna de la Doctrina Monroe (1823), que declaraba que América estaba fuera del alcance de una nueva colonización europea.
- Advirtió a las potencias europeas que no interfirieran en el hemisferio occidental.
- A cambio, Estados Unidos prometió no inmiscuirse en los asuntos europeos.
- La política tenía como objetivo proteger a las naciones latinoamericanas recién independizadas.
- Posteriormente se convirtió en la piedra angular de la influencia estadounidense en las Américas.


























