Desde agosto de 2024, junto con los drones Shahed-136, los rusos han comenzado a lanzar los primeros drones señuelo Herbera y Parody y sus análogos en lo profundo de Ucrania, con el objetivo de distraer los sistemas de defensa aérea.
El analista militar Oleksandr Kovalenko del grupo Resistencia a la Información lo compartió en un comentario exclusivo según Ukrinform.
«Los drones señuelo son baratos y prácticamente están hechos de plástico o espuma. Los ocupantes les instalan ‘lentes de Luneburg’ improvisadas, que imitan la apariencia de drones kamikazes como el Shahed-136. Hasta que un drone es derribado, especialmente de noche, es difícil para saber si se trata de un Shahed o de un señuelo. Esto ha llevado a una situación en la que cada mes se lanzan a Ucrania hasta 2.000 drones, como ocurrió en octubre. Y entre estos 2.000 drones, las estadísticas incluyen no sólo kamikazes sino también señuelos. que son difíciles de identificar rápidamente», señaló el experto.
Afirmó que, con cierta certeza, podemos decir que durante los ataques recientes se utilizaron más drones señuelo que drones Shahed-136.
Los drones señuelo llaman la atención, dispersan nuestros recursos de defensa aérea y los obligan a utilizar mucha más munición. Además, estos drones tienen capacidades de reconocimiento. Gracias a su gran número, el enemigo logra localizar las posiciones de los equipos de fuego, los sistemas de misiles antiaéreos, las estaciones de radar y otros medios», subrayó Kovalenko.
Como informa Ukrinform, en los últimos tres meses Rusia ha utilizado 4.300 drones de ataque del tipo Shahed y otros tipos contra Ucrania. Las unidades de defensa aérea de las Fuerzas de Defensa de Ucrania han conseguido derribar 3.063 vehículos aéreos no tripulados, lo que representa el 71% del total.