El segundo candidato en las elecciones presidenciales de Mozambique del 9 de octubre, Venancio Mondlane, aceptó la oferta del presidente Filipe Nyusi de unirse a las conversaciones con él y otros tres candidatos con la esperanza de poner fin a semanas de protestas y violencia postelectorales que han dejado al menos 30 muertos en el sureste. País africano.
Nyusi llamó al diálogo durante un discurso sobre el estado de la nación el martes, diciendo que las manifestaciones estaban limitando las actividades de las empresas, paralizando los envíos desde los puertos y dejando a la gente sin trabajo, entre otras cuestiones que están afectando negativamente a la economía del país.
Desde su página de Facebook, Mondlane dijo que había aceptado la oferta de diálogo y que presentaría el sábado su propuesta de agenda para las conversaciones, que están propuestas para el martes. No hubo indicios de que los otros candidatos respondieran al llamado de Nyusi.
Nyusi, que entregará su cargo en enero a Daniel Chapo si el Consejo Constitucional confirma los resultados electorales, apeló al diálogo con Mondlane junto con el candidato del partido gobernante Chapo y los otros dos aspirantes a la presidencia, Ossufo Momade de Renamo y Lutero Simango del Partido Demócrata. Movimiento de Mozambique.
Las manifestaciones estallaron el 24 de octubre cuando la comisión electoral nacional declaró ganador al candidato del partido gobernante Frelimo, Chapo, con casi el 71% de los votos. Mondlane y su partido Podemos, que según la comisión quedó en segundo lugar con el 20% de los votos, impugnaron la votación y convocaron protestas.
El grupo de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch ha informado que, si bien muchas de las protestas han sido pacíficas, algunos manifestantes han quemado neumáticos y bloqueado carreteras. El personal de seguridad de Mozambique respondió con gases lacrimógenos, perros, balas de goma y, en algunos casos, munición real.
Además de las muertes, dijo Nyusi, más de 800 personas, incluidos 66 agentes de seguridad, han resultado heridas.
Human Rights Watch, Amnistía Internacional y otros grupos han condenado la respuesta violenta del personal de seguridad, así como las represalias violentas de los manifestantes. Han pedido la liberación de las personas detenidas ilegal y arbitrariamente y han pedido a las autoridades regionales que presionen al gobierno de Mozambique y a las fuerzas de seguridad para que respeten los derechos humanos fundamentales.
Jeff Custer de la VOA contribuyó a este informe.