Se basa en investigaciones anteriores que muestran que la energía solar puede almacenarse hasta 18 años.
El almacenamiento de energía solar es una parte clave del rompecabezas de la energía limpia.
El mundo está en camino de instalar casi 600 GW valor de la energía solar este año: un 29 por ciento más que el año pasado, incluso después de un crecimiento sin precedentes en 2023.
Asegurarse de que la energía solar pueda almacenarse es clave para llevar las energías renovables al siguiente nivel, según el grupo de expertos británico Ember.
Pero -entre otros desafíos- muchos Baterías Están hechos de materiales no sostenibles y tienen tendencia a sobrecalentarse.
En un desarrollo “muy emocionante”, investigadores de la Escuela de Ingeniería de Barcelona Este (EEBE) han abordado ahora ambas cuestiones con un dispositivo híbrido único.
“Estoy muy entusiasmado con esto porque estamos demostrando que es posible aumentar la eficiencia y añadir almacenamiento a los sistemas fotovoltaicos”, explica a Euronews Green el investigador principal, el profesor Kasper Moth-Poulsen.
¿Cómo funciona la nueva tecnología de almacenamiento solar?
El dispositivo combina una célula solar de silicio con un sistema de almacenamiento llamado MOST (sistema de almacenamiento de energía solar térmica molecular).
Mientras trabajaba en la Universidad Tecnológica Chalmers en Gotemburgo, Moth-Poulsen utilizó MOST para demostrar que La energía solar se puede almacenar durante 18 años.
La tecnología se basa en una molécula de carbono, hidrógeno y nitrógeno especialmente diseñada que cambia de forma cuando entra en contacto con la luz solar.
Se trata de elementos comunes que ofrecen una alternativa a otras tecnologías que dependen de materiales escasos como el litio.
Cuando la luz ultravioleta incide sobre ellas, las moléculas orgánicas sufren una transformación química y almacenan la energía para su uso posterior.
Una característica única del sistema es que las moléculas también proporcionan enfriamiento en la célula fotovoltaica actuando como un filtro óptico y bloqueando los fotones (partículas de luz) que normalmente causarían calentamiento.
Como era de esperar, batería Los sistemas funcionan de manera más eficiente cuando no se calientan demasiado.
En este caso, las pruebas de laboratorio han logrado una eficiencia récord de almacenamiento de energía del 2,3 por ciento para la energía solar térmica molecular (frente al 1,1 por ciento habitual).
La segunda parte fotovoltaica del dispositivo, que convierte la energía solar en electricidad, también ha obtenido ganancias de eficiencia gracias al efecto de enfriamiento del sistema MOST.
¿Cómo se podría utilizar esta batería solar y cuál es el futuro?
“Con un mayor desarrollo, podría ser posible desarrollar esta tecnología como una actualización para las instalaciones de células solares existentes”, dice Moth-Poulsen.
Después de esta exitosa demostración a escala de laboratorio, detallada en la revista JouleLos investigadores ahora tienen que realizar algunos trabajos de ingeniería para que la tecnología sea resistente y pueda usarse a largo plazo. También necesitan mejorar la producción de materiales para reducir el precio.
“Actualmente, los sistemas se fabrican en laboratorios universitarios; en el futuro tendremos que trabajar junto con otros socios para ampliar su escala”, añade.
Aunque todavía se encuentra en una fase inicial, los investigadores esperan que su invención híbrida ayude pronto a reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles y a minimizar el impacto ambiental de otras baterías.