El jueves, la Iniciativa de la Sociedad Civil (CSI) pidió que se tomen medidas más enérgicas contra las pandillas que aterrorizan a la población de esta capital.
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Los pandilleros ya atacaron el aeropuerto, el puerto, escuelas, universidades, comisarías, prisiones, ministerios, sucursales bancarias, tiendas comunitarias, la Imprenta Nacional, que se publicó por primera vez en 1804, y prendieron fuego a un almacén de 96.000 metros cuadrados. en la zona de libre comercio. Es vital buscar formas de eliminar el bandidaje en el país caribeño, y los miembros del Consejo Presidencial de Transición deben crear un clima de convivencia, solidaridad y eficiencia ciudadana.
El clamor del ISC se conoce al mismo tiempo que el Consejo Superior de la Judicatura denunció el asesinato del magistrado Questel Maximé perpetrado por pandilleros.
La muerte de Maximé es una gran pérdida para el sistema judicial, subraya el comunicado de este órgano judicial.
En un acto de violencia choquant, el juez Maximé Questel, travaillant au Tribunal de Paix dans la commune de Pilate, a été trágico asesinato el martes 23 de abril. La communauté est sous le choc alors que les détails…..Lire la suite sur #netalkolemedia.com pic.twitter.com/Pn2vpB9aAC
– Medios NetAlKole (@netalkole)
25 de abril de 2024
En un acto de violencia choquant, el juez Maximé Questel, travaillant au Tribunal de Paix dans la commune de Pilate, a été trágico asesinato el martes 23 de abril. La communauté est sous le choc alors que les détails…..Lire la suite sur #netalkolemedia.com pic.twitter.com/Pn2vpB9aAC
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25 de abril de 2024
El texto dice,
En un impactante acto de violencia, el juez Maximé Questel, que trabajaba en el Tribunal de Paz de la comuna de Pilatos, fue trágicamente asesinado el martes 23 de abril. La comunidad está en shock al conocer los detalles.
En este contexto, la Conferencia de Pastores Haitianos rechazó cualquier propuesta de negociación política con las pandillas.
«No tienen ningún motivo ideológico», subrayó el asesor especial de la entidad, Ernst Pierre, que recomendó utilizar medios más fuertes para obligar a los bandidos a deponer las armas, si no quieren hacerlo voluntariamente.
Los pandilleros ya atacaron el aeropuerto, el puerto, escuelas, universidades, comisarías, prisiones, ministerios, sucursales bancarias, tiendas comunitarias, la Imprenta Nacional, que se publicó por primera vez en 1804, y prendieron fuego a un almacén de 96.000 metros cuadrados. en la zona de libre comercio.
También atacaron autos particulares, un seminario religioso, la primera Iglesia Bautista de Haití, fundada hace más de 180 años, y más de una decena de farmacias, y en demostración de que van en serio, quemaron la casa del comandante en jefe de la Policía Nacional de Haití.