Sin contratos de trabajo, congeladores para almacenar alimentos a más de 0°C, hedor a carne podrida, plaga de insectos, instalaciones sanitarias rotas: estas son algunas de las condiciones inhumanas a las que se enfrentaban los marineros a bordo del Serafinaun buque de carga general de 31 años de antigüedad detenido en Haifa, Israel, luego de una inspección realizada por la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF).
El Control del Estado del Puerto (PSC) de Haifa detuvo el buque con bandera de Palau después de encontrar 29 defectos, de los cuales 18 están clasificados como infracciones de las normas que por sí solas podrían haber llevado a la detención.
“Es una vergüenza absoluta que los marineros se vean obligados a trabajar en estas condiciones inhumanas”, afirmó el inspector de la ITF, Assaf Hader.
Hadar ya ha garantizado que la tripulación disponga de baños y duchas portátiles en el muelle y está trabajando para garantizar que los marineros sean repatriados a sus países de origen.
El barco es propiedad de la empresa turca Dalyan Shipping según Equasis.