El asediado fabricante de automóviles alemán Volkswagen ha lanzado una empresa conjunta con el fabricante estadounidense de vehículos eléctricos Rivian.
La empresa está valorada en 5.800 millones de dólares (5.460 millones de euros) de inversión total.
Se espera que la asociación se base en el software avanzado y la tecnología de vehículos eléctricos de Rivian, y se espera que los primeros modelos comiencen a funcionar en 2027, dijo el director ejecutivo del Grupo VW, Oliver Blume, en el lanzamiento de la empresa conjunta el martes en Palo Alto, California.
Blume dijo que el lanzamiento en 2027 comenzaría con Volkswagen y sería seguido por Audi, Scout, Porsche y otras marcas.
En junio, las empresas anunciaron la intención de embarcarse en una empresa conjunta con vistas a crear «plataformas definidas por software (SDV) de próxima generación» que se utilizarían en los vehículos eléctricos de ambas empresas.
La nueva empresa conjunta comenzará a operar el miércoles y tendrá su sede en Palo Alto, con otras ubicaciones planificadas para Europa y América del Norte.
Desafíos que enfrentan ambas empresas
El acuerdo ofrece una importante oportunidad financiera para Rivian, ya que la compañía opera con pérdidas debido a la disminución del apetito estadounidense por los vehículos eléctricos.
Rivian se fundó en 2009 y se especializa en SUV y camionetas grandes, que son opciones populares en el mercado estadounidense.
En el último trimestre, Rivian informó una pérdida de 392 millones de dólares frente a 874 millones de dólares en ingresos, a pesar de entregar alrededor de 10.000 vehículos.
En el mismo período, VW gestionó casi 2,2 millones de entregas de vehículos, generando 78.500 millones de euros (83.300 millones de dólares) en ingresos y asegurando una ganancia de 1.580 millones de euros después de impuestos, lo que representa una pérdida neta de ganancias año tras año.
VW está en medio de una crisis de ventas y costos y dice que necesita cerrar fábricas en Alemania y despedir a miles de empleados y se encuentra entre los fabricantes de automóviles europeos que enfrentan una mayor competencia de los autos eléctricos chinos más baratos.
VW también ha tenido problemas con su propia empresa de desarrollo de software CARIAD, lo que ha obligado a sus filiales Audi y Porsche a retrasar la introducción de nuevos vehículos eléctricos hasta dos años, según el diario económico alemán. Handelsblatt.
kb/wmr (dpa, AFP)