Marlene Engelhorn lleva años luchando por un sistema fiscal más equitativo en su país. En Austria se creará un consejo de ciudadanos para decidir cómo distribuir el dinero.
Una heredera en Austria convocará una asamblea de ciudadanos para regalar la fortuna de 25 millones de euros que heredó.
Marlene Engelhorn, una mujer austriaca de 31 años, heredó el dinero de su familia, propietaria del gigante químico BASF. Quiere que su vasta riqueza se redistribuya en toda la sociedad y ha hecho campaña durante años por un sistema fiscal más equitativo en su país de origen.
«Se pueden redistribuir 25 millones de euros porque el Estado no los redistribuye. Tengo este dinero porque no está sujeto a impuestos. Tengo este dinero porque el gobierno no ha cumplido su mandato de garantizar que la riqueza se distribuya de esa manera en la sociedad». que no acabe en mis manos de manera desigual sólo porque estoy en este mundo, en esta familia particular, con este apellido», dijo Marlene Engelhorn durante una conferencia de prensa el miércoles.
La heredera lleva muchos años instando al gobierno a imponer impuestos sobre ese dinero. Sin embargo, dada la ausencia en Austria de impuestos a la herencia o al patrimonio, buscó una solución alternativa: crear un consejo para decidir cómo se distribuiría la fortuna.
Se formará un Consejo Ciudadano compuesto por 50 personas mediante un proceso de dos pasos: se enviarán 10.000 cartas a los residentes, seguido de la selección de 50 miembros y 15 suplentes. La elegibilidad requiere que los miembros sean mayores de 16 años y representativos de la población de Austria.
El Consejo «Guter Rat für Rückverteilung», que significa buenos consejos para la redistribución, se reunirá durante seis fines de semana de marzo a junio y trabajará en propuestas para distribuir la riqueza.
Marlene Engelhorn no tendrá ninguna influencia en la distribución.