Las autoridades de la región autónoma somalí de Puntlandia dijeron que ocho militantes extranjeros murieron tras un ataque de combatientes islámicos contra las fuerzas de seguridad el martes temprano.
Los residentes dijeron que el ataque comenzó con un atentado suicida con bomba que tuvo como objetivo un área de la aldea de Dharjale en las tierras altas del extremo oriental de Puntlandia, donde estaban acampados las fuerzas de seguridad y los funcionarios.
En una declaración de audio publicada en el canal Telegram de las fuerzas de seguridad de la región, el portavoz de las operaciones de seguridad de Puntlandia, el general de brigada Mohamud Mohamed Ahmed, confirmó el ataque.
«Las fuerzas antiterroristas de Puntlandia en Dharjale, región de Bari, fueron atacadas por el grupo terrorista chupasangre Daesh», dijo.
“Las fuerzas de seguridad habían estado siguiendo sus movimientos y estaban preparadas. Se han expuesto los cadáveres de ocho extranjeros y sus armas”.
Ahmed dijo que las fuerzas de seguridad de Puntlandia sufrieron «bajas limitadas».
Los residentes informaron de más víctimas entre los civiles de la aldea debido a la metralla de la explosión. Las fotografías supuestamente de militantes muertos muestran cabezas cortadas y carne quemada y mutilada, lo que indica el uso de un artefacto explosivo masivo.
Puntlandia anunció este mes que se habían completado los preparativos para una ofensiva contra grupos extremistas en la región.
El líder de la región, Said Abdullahi Deni, instó al público a apoyar la operación, sin revelar cuándo podría comenzar. Testigos y residentes dijeron que las fuerzas de Puntlandia se trasladaron al este de Puntlandia una vez concluidos los preparativos.
Al-Shabab y el Estado Islámico (EI) han estado operando en Puntlandia. La operación parece centrarse en el EI. Deni ofreció amnistía a los militantes que renuncien a la violencia y a su pertenencia a grupos terroristas.
Oficiales militares estadounidenses y expertos en seguridad somalíes informaron que el EI en Somalia aumentó su número de miembros este año.
Anteriormente se había informado que el número de combatientes del EI oscilaba entre 100 y 400, pero los expertos en seguridad e inteligencia somalíes estiman que su número actual es de 500 a 600 militantes, una cifra que aún no ha sido confirmada por las autoridades locales.
Se dice que la mayoría de los recién llegados proceden de Oriente Medio y del este y norte de África.
El EI en Somalia fue formado en octubre de 2015 por un grupo de excombatientes de al-Shabab liderados por el clérigo jeque Abdulkadir Mumin, quien supuestamente juró lealtad al difunto líder del EI Abu Bakr al-Baghdadi. Mumin parece haber sobrevivido a un ataque aéreo estadounidense el 31 de mayo.