En un tweet publicado por Axie Infinity el jueves por la noche, una lucrativa parcela de tierra dentro del juego de tokens no fungibles de fantasía de batalla de monstruos, o NFT, se vendió por 550 ETH ($ 2,3 millones). Los hachas son criaturas que los usuarios ordenan para batirse en duelo con otros jugadores, luchar contra enemigos y completar misiones diarias. También son NFT que se pueden criar (acuñar), comprar y vender libremente.
✨¡Una parcela de tierra de Genesis acaba de venderse por 550 ETH!
¡Eso es más de 2,3 M USD!
Nuestra nación digital propiedad de jugadores continúa conmocionando al mundo pic.twitter.com/SVvAtFNYUF
– Axie Infinity (@AxieInfinity) 24 de noviembre de 2021
El juego tiene lugar en el mundo de Lunacia en el que habita Axies. Es una cuadrícula cuadrada de 301 × 301 donde cada sección representa una parcela de tierra tokeized llamada Terra, que los jugadores también pueden comprar, vender o alquilar a otros jugadores a voluntad. El terreno que se vendió ayer se clasifica como Génesis, que es la forma más rara de bienes raíces virtuales disponible en el ecosistema Axie Infinity.
Los monstruos, conocidos como Quimeras, aparecen en el juego y aterrorizan a Lunaria. Al derrotar a las quimeras, los jugadores ganan Smooth Love Potions (SLP), que luego se pueden vender en intercambios de criptomonedas por dinero en efectivo. Las quimeras derrotadas también sueltan otros tipos de recursos que se pueden usar para mejorar sus ejes y tierras, aumentar así el potencial de ganancias para los SLP. Genesis Land se encuentra estratégicamente en el centro de Lunacia, donde los jefes de incursión de Quimeras raros engendran y sueltan artículos especiales. Además, solo 220 de 90.601 espacios terrestres tienen la clasificación Génesis.
Los críticos del juego dicen que no hay nada físicamente tangible con los bienes raíces virtuales y se preguntan por qué tendrían algún valor. Pero para algunos, jugar Axie Infinity es un trabajo de tiempo completo que merece inversiones iniciales, especialmente en los países en desarrollo, donde los SLP que ganan cada día en el juego a menudo pueden superar los salarios mínimos de los países.