KUALA LUMPUR: Unos 27.000 ciudadanos extranjeros en Malasia culpables de delitos de inmigración se han aprovechado de un programa gubernamental que les permite regresar a sus hogares simplemente pagando una multa nominal.
La iniciativa, denominada Programa de Repatriación de Migrantes, comenzó el 1 de marzo y finalizará el 31 de diciembre.
El director del Departamento de Inmigración de Kuala Lumpur, Wan Mohammed Saupee Wan Yusoff, dijo a los medios locales el lunes (9 de diciembre) que aquellos que solicitaron regresar a sus países de origen a través del programa han pagado RM13,12 millones (USD 2,96 millones) en multas.
«Procesamos más de 350 solicitudes diariamente», dijo, citado por Malay Mail.
Según el Departamento de Inmigración, quienes deseen regresar a casa a través de la iniciativa tendrán que pagar una multa de entre 300 y 500 ringgit, dependiendo de la naturaleza de su delito.
Esto puede incluir quedarse más tiempo en el país o violar las condiciones de su visa.
Wan Mohammed, el funcionario de inmigración, también dijo a los medios locales que los respectivos solicitantes deben presentar documentos de viaje y billetes de avión válidos. También pueden consultar a sus respectivas embajadas para obtener ayuda.
“Ningún agente o tercero está autorizado a manejar solicitudes en nombre del Departamento de Inmigración”, advirtió.
Para el trabajador nepalí Yogendra, el programa de repatriación le dio la oportunidad de salir de Malasia después de dos años de trabajar en el país.
“Tengo pasaporte, pero expiró hace poco. Entonces, llegué aquí temprano y solo tuve que pagar una multa de 500 RM. Esta es una manera segura para mí de regresar a casa sin temor a ser detenido”, dijo el joven de 26 años, citado por Malay Mail.
Mientras tanto, un trabajador indonesio, Zainuddin, viajó desde Johor a Terengganu con su amigo para solicitar allí el programa de repatriación y evitar largas colas en las oficinas del Departamento de Inmigración en las grandes ciudades.
“Nos prometieron permisos, pero nuestro empleador siguió retrasándolos”, dijo este hombre de 37 años, que había trabajado en plantaciones de aceite de palma desde junio de 2022 sin los permisos de trabajo adecuados.
El Banco Mundial estima que hubo entre 1,2 y 3,5 millones de inmigrantes indocumentados en Malasia entre 2018 y 2020, principalmente aquellos que provienen de Indonesia, Bangladesh y Myanmar.
Mientras tanto, el número de inmigrantes documentados durante el mismo período fue de entre 1,4 y 2 millones.
La mayoría de los trabajadores migrantes en Malasia trabajan en sectores intensivos en mano de obra, como la construcción, la agricultura y la manufactura, así como en ocupaciones consideradas sucias, peligrosas o degradantes, más conocidas como trabajos 3D.