ESTE es el dramático momento en que un tornado derribó las luces navideñas en España, mientras la tormenta Emilia continúa atormentando al país.
Las imágenes muestran que las estructuras festivas se doblan bajo la fuerza del vendaval, antes de estrellarse contra el suelo.
El tornado causó caos en las primeras horas esta mañana en el centro de La Cala de Mijas, en la Costa del Sol.
Los fuertes vientos, que alcanzaron de 80 mph, levantaron pequeñas embarcaciones de la arena y arrancaron árboles y cacerías de la playa.
La costa también se vio azotada por relámpagos y fuertes lluvias durante toda la noche.
Los bomberos fueron llamados a siete incidentes graves relacionados, en su mayoría, con árboles y ramas caídos.
Al menos ocho coches resultaron gravemente dañados por la caída de ramas, informan los medios locales.
Los servicios de emergencia están trabajando para despejar las carreteras bloqueadas y restablecer la seguridad.
La alerta meteorológica amarilla se emitió el lunes por la noche, advirtiendo de fuertes rachas de viento y precipitaciones intensas en el litoral malagueño y el Valle del Guadalhorce.
Esto se produce después de que la tormenta Emilia azotara regiones turísticas populares con temperaturas bajo cero, fuertes oleajes e incluso nieve durante todo el fin de semana.
El meteorólogo español Aemet emitió de una docena de alertas de alto nivel el domingo por la noche y confirmó que probablemente persistiría el clima inestable.
El lunes, estaban vigentes alertas naranjas en las regiones del sureste de Murcia y Andalucía por tormentas severas.
Se esperaba que estas zonas acumularan 100 litros de lluvia por metro cuadrado en sólo doce horas.
Dijeron: «¡Peligro extremo! Son posibles inundaciones y desbordamientos de ríos. Siga las recomendaciones de Protección Civil».
También se emitieron alertas máximas en toda Murcia debido a fuertes lluvias y riesgos de inundaciones.
Los colegios fueron cerrados en el municipio de Los Alcázares, ante el riesgo de inundaciones en el cauce seco del río local, que alcanzó su capacidad (3,10 metros) a las 5 de la madrugada.
Los servicios de emergencia de la región activaron ayer por la mañana temprano el Plan Inumur (Nivel 1) de preparación para inundaciones.
La alerta roja por fuertes precipitaciones en el litoral valenciano finalizó a las seis de la mañana de este lunes.
Esto se produce poco de un año después de que las devastadoras inundaciones de la DANA en la región se cobraran de 200 vidas.
La rara advertencia indica “un riesgo extremo para la vida” y una perturbación grave.
Pero ayer se mantenía la alerta amarilla y se esperaba que las precipitaciones alcanzaran los 60 litros por metro cuadrado en doce horas.
El tiempo ya ha parado eventos importantes como el partido de Liga del domingo entre Levante y Alicante suspendido por la Federación Española de Fútbol debido a la alerta roja.
En el este de Andalucía, se enviaron mensajes de emergencia Es-Alert a miles de teléfonos móviles mientras las autoridades se preparaban para las fuertes lluvias relacionadas con la tormenta.



























