La junta militar de Níger está cuestionando la decisión de la empresa francesa de combustible nuclear Orano de detener la producción de uranio, según un documento de un socio estatal en la empresa visto el viernes por la Agence France-Presse.
Orano anunció el mes pasado que detendría la producción a partir del jueves, debido a lo que denominó condiciones operativas cada vez más difíciles en el país y problemas financieros.
La empresa estatal nigerina Sopamin es accionista de Orano, que posee una participación mayoritaria en Somair, la última planta que el grupo francés todavía operaba en el país antes del jueves.
Los franceses lamentaron la retirada por parte de la junta en junio de un permiso para uno de los mayores depósitos de uranio del mundo, Imouraren, y la imposibilidad de exportar la materia prima con la frontera de Níger con Benin cerrada por lo que Niamey dice que son razones de seguridad.
«A pesar de su condición de coaccionista, Sopamin no fue consultada sobre esta grave decisión» de detener la producción, afirmó en un documento fechado el jueves la empresa, que opera desde hace medio siglo en el norte del país.
La firma nigerina se quejó de que la decisión «carece de transparencia» y «viola una serie de principios y prácticas esenciales para la gobernanza y los compromisos entre las partes interesadas».
Orano dijo que había propuesto una alternativa a las autoridades nigerinas, es decir, exportar el uranio a Francia o Namibia, y lamentó que no hubiera reacción a la sugerencia.
Níger afirma en el documento visto el viernes su deseo de «comprar 210 toneladas de uranio a través del canal natural de Sopamin», lo que, según dijo, «permitiría a Somair continuar sus actividades».
Actualmente, 1.050 toneladas de concentrado de uranio procedentes de reservas de 2023 y 2024, o alrededor de la mitad de la producción anual media del sitio, valorada en unos 300 millones de euros (360 millones de dólares), están bloqueadas, estima Orano.
La junta gobernante, que tomó el poder el año pasado mediante un golpe de estado en julio, dice que renovará las reglas que regulan la extracción de materias primas por parte de compañías extranjeras en lo que es el séptimo mayor productor de uranio del mundo.
También ha degradado los vínculos con la antigua potencia colonial Francia y ha fortalecido los vínculos con nuevos socios, incluidos Rusia e Irán.
En septiembre, el Consejo de Ministros de Níger adoptó un proyecto de decreto por el que se creaba una entidad estatal, la «Compañía Nacional de Uranio Timersoi», abreviada como TNUC.