En un dramático giro de los acontecimientos durante la ronda final del Campeonato BMW, Rory McIlroy se encontró en una situación extraordinaria que puso de manifiesto tanto su frustración como su notable habilidad. Después de una semana llena de desafíos y decepciones, McIlroy se enfrentó a un nuevo revés en el hoyo 9, par 4, en Castle Pines Golf Club.
Luego de un tiro de salida desviado que terminó peligrosamente cerca de un arroyo, el driver de Rory McIlroy se partió por la mitad cuando se apoyó en él para recuperar su tee. Este incidente, ocurrido apenas unos días después de haber arrojado otro palo de golf al agua en un ataque de ira, preparó el escenario para una inusual pero impresionante exhibición de destreza golfística.
Cuando Rory McIlroy comenzó su ronda el domingo, su desempeño ya estaba bajo escrutinio. A pesar de mostrar una mejoría con respecto a su pésimo desempeño en el primer partido del play-off del PGA Tour, donde empató en el puesto 68, las esperanzas de McIlroy de asegurarse el premio mayor de 25 millones de dólares de la FedEx Cup se estaban desvaneciendo.
En la ronda final en Castle Pines, comenzó entre los 10 primeros, pero una serie de errores le hicieron pasar apuros a medida que se acercaba al hoyo 9. Su frustración llegó a su punto álgido cuando se le rompió el driver, lo que dio lugar a una secuencia inesperada de acontecimientos que captaría la atención de los aficionados al golf y de los comentaristas por igual.
El incidente del conductor de Rory McIlroy
El driver de Rory McIlroy se rompió después de que apoyara su peso sobre él mientras intentaba recuperar su tee de salida. El incidente ocurrió en el hoyo 9, donde su drive se había desviado y había caído cerca de los bancos rocosos y en la zona de obstáculos de agua.
La rotura accidental se produjo cuando McIlroy se apoyó en el eje, lo que provocó que se partiera en dos. La cabeza del piloto voló por los aires y estuvo a punto de alcanzar a McIlroy y a su caddie, Harry Diamond.
Según las reglas, si un palo de golf que cumple con las normas se daña debido a un uso indebido, no se puede reemplazar ni reparar durante el juego. La reacción de Rory McIlroy fue considerada una infracción de la Regla 4.1a(2), que prohíbe reemplazar un palo dañado intencionalmente. Por lo tanto, McIlroy se quedó sin su driver durante el resto de la ronda.