El presidente Joe Biden dijo el miércoles que era “sorprendente” que el Congreso aún no haya aprobado decenas de miles de millones de dólares en asistencia militar y económica para Ucrania, mientras su administración advertía sobre consecuencias nefastas para Kiev (y un “regalo” para Vladimir Putin de Rusia). si los legisladores no actúan.
Hablando en la Casa Blanca, Biden dijo que los republicanos que insisten en cambios en la política fronteriza como condición para votar a favor de la ayuda «están jugando a la gallina con nuestra seguridad nacional», aun cuando expresó su apertura a algunos cambios de política.
“Los republicanos en el Congreso están dispuestos a darle a Putin el mayor regalo que podría esperar”, dijo Biden, diciendo que la credibilidad estadounidense estaba en juego tanto ante otros posibles agresores como ante sus aliados. “Cualquier interrupción en nuestra capacidad de abastecer a Ucrania claramente fortalece la posición de Putin”.
«Si no apoyamos a Ucrania, ¿qué va a hacer el resto del mundo?», añadió.
El discurso de Biden se produce horas después de que se reuniera con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy y los líderes del Grupo de los Siete democracias avanzadas, que han apoyado incondicionalmente a Ucrania contra la invasión rusa en curso.
Biden ha pedido al Congreso casi 106.000 millones de dólares para financiar las guerras en Ucrania, Israel y otras necesidades de seguridad, pero ha enfrentado una dura resistencia en el Capitolio. Algunos republicanos se han cansado de brindar apoyo a Ucrania después de que Estados Unidos ya haya enviado 111 mil millones de dólares, y otros legisladores republicanos insisten en cambios estrictos a la política fronteriza estadounidense como condición para votar a favor de la medida.
Biden dijo que apoya más fondos para la seguridad fronteriza. «Estoy dispuesto a hacer concesiones importantes en la frontera», dijo. “Necesitamos arreglar el sistema fronterizo roto.
Está roto.» Añadió que está «listo para cambiar la política también», pero acusó a los republicanos de querer una cuestión política más que un compromiso bipartidista.