El máximo sacerdote católico de Hong Kong ha pedido que se busque la justicia a través de la empatía en lugar de la venganza, al tiempo que instó a renovar la esperanza en la economía local y global en su mensaje de Navidad.
El cardenal Stephen Chow Sau-yan, jefe de la diócesis católica de Hong Kong, invitó el lunes a los fieles a esperar la “promesa de alegría y esperanza de la Navidad”, a pesar de las “realidades depresivas y que provocan ansiedad”.
Reconoció los desafíos que enfrenta Hong Kong y el mundo, incluida una recuperación económica más lenta de lo esperado, una geopolítica cada vez más tensa y crecientes problemas de salud mental entre los jóvenes y los ancianos.
Pero Chow dijo que con “esperanza y amor en nuestra conciencia”, el amor podría llegar a las comunidades marginadas, que luchan por sentirse no deseadas y abandonadas.
Entre ellos se encuentran prisioneros que esperan una nueva vida, parejas casadas que no ven un futuro suficientemente estable para tener hijos, jóvenes que no logran identificar razones convincentes para vislumbrar un futuro esperanzador y ancianos que se sienten solos y abandonados, entre otros.
“Lo mejor para nosotros y el de las generaciones futuras es que podamos ayudar a las partes más débiles a fortalecerse para que juntos podamos tener un presente mejor y un futuro lleno de esperanza”, dijo.