Seúl, 25 de marzo (Yonhap) — Corea del Norte ha confirmado, este viernes, que probó un misil balístico intercontinental (ICBM) Hwasong-17 el día anterior por orden directa de su líder, Kim Jong-un.
Kim dijo que la «nueva arma estratégica de la RPDC haría que todo el mundo fuera claramente consciente una vez más del poder de nuestras fuerzas armadas estratégicas», dijo la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA, por sus siglas en inglés).
«Él enfatizó que nuestras fuerzas de defensa nacional poseerían formidables capacidades militares y técnicas imperturbables por cualquier amenaza militar y chantaje y se mantendrían completamente listas para una confrontación prolongada con los imperialistas estadounidenses», agregó.
El ICBM voló 1.090 kilómetros a una altitud máxima de 6.248 km antes de aterrizar en el Mar del Este, según la KCNA.
El lanzamiento del jueves marcó el primer lanzamiento de un misil balístico intercontinental de la RPDC desde 2017, en un movimiento que aumentó drásticamente las tensiones en la región.
La demostración de fuerza de Pyongyang, la 12 de este año, significa el fin de su moratoria autoimpuesta sobre las pruebas nucleares y de misiles de largo alcance.