KUALA LUMPUR: El ex líder encarcelado de Malasia, Najib Razak, comenzó su defensa el lunes (2 de diciembre) contra cargos de corrupción relacionados con más de 500 millones de dólares en presuntos sobornos y varios cargos de lavado de dinero, diciendo que tenían «motivaciones políticas».
El ex primer ministro, que ya cumple una condena de seis años de cárcel por corrupción relacionada con el expolio del fondo soberano 1MDB, se enfrenta a varios otros casos relacionados con el escándalo financiero que llevó a su derrota en las elecciones de 2018.
Najib subió al estrado y dijo al tribunal: «Los cargos contra mí tienen motivaciones políticas».
El caso involucra 2.270 millones de ringgit (510 millones de dólares) en presuntos sobornos y 21 cargos de lavado de dinero.
Si es declarado culpable, Najib se enfrenta a fuertes multas y sentencias de hasta 20 años por cada cargo de abuso de poder.
Vestido con un traje azul marino y corbata a juego, el hombre de 71 años tosió durante su discurso inicial.
Su esposa Rosmah Mansor estaba sentada en la tribuna pública.
El caso involucra a Tanore Finance Corp, que según las autoridades estadounidenses se utilizó para desviar dinero de 1MDB. Supuestamente se utilizó para canalizar dinero a la cuenta bancaria personal de Najib.
Najib se disculpó en octubre porque el escándalo del 1MDB ocurrió durante su mandato, pero sostuvo que no tenía conocimiento de transferencias ilegales del ahora desaparecido fondo estatal.
Su principal abogado, Muhammad Shafee Abdullah, ha dicho que estaban «más decididos» que nunca a luchar en el caso.
Durante el proceso del lunes, el juez Collin Lawrence Sequerah accedió a la petición de Najib de leer en voz alta toda su declaración testimonial, que consta de 525 páginas.