El fabricante alemán de taxis aéreos Volocopter el lunes dijo que se había declarado en quiebra ante el tribunal de distrito de Karlsruhedías después de que uno de sus competidores más cercanos se salvara del colapso.
Sin embargo, la compañía dijo que todavía estaba buscando inversores y planeaba seguir adelante con su plan para ingresar al mercado de taxis aéreos comerciales.
¿Por qué Volocopter está en problemas?
Volocopter, con sede cerca de Stuttgart, aún necesita la certificación de tipo de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) para el lanzamiento al mercado de su línea de productos biplaza Volocity.
Aunque ha solicitado un procedimiento de insolvencia, la empresa dijo que lo hacía bajo el supuesto de que se encontraría un inversor en el nuevo año.
Mientras tanto, dijo que la petición de quiebra era necesaria para mantenerse a flote.
«A pesar de los recientes esfuerzos intensivos de recaudación de fondos, no ha sido posible encontrar una solución viable para mantener las operaciones regulares fuera de los procedimientos de insolvencia», dijo Volocopter.
«Las operaciones comerciales continuarán con normalidad durante el procedimiento de insolvencia provisional.»
La compañía dijo que estaba «cerca de la línea de meta» para obtener la aprobación para la tecnología de aterrizaje y despegue vertical totalmente eléctrica del Volocity.
«La empresa necesita financiación para dar los últimos pasos hacia la entrada en el mercado. Nos esforzaremos en desarrollar un concepto de reestructuración a finales de febrero y ponerlo en práctica con los inversores», afirmó el administrador provisional de insolvencia designado por el tribunal, Tobias Wahl.
La compañía, fundada en 2011, sufrió un duro golpe cuando se vio obligada a cancelar vuelos de prueba durante los Juegos Olímpicos de verano en París porque el certificado de su motor de avión no llegó a tiempo.
Volocopter dijo en diciembre que el modelo Volocity había cumplido tres cuartas partes de los criterios requeridos por la EASA. La firma está trabajando en un modelo de cinco plazas, que pretende presentar en 2027.
El competidor vuelve del borde del abismo
La semana pasada se encontró un inversor para rescatar de la insolvencia al pionero alemán de los aviones eléctricos Lilium.
El consorcio Mobile Uplift Corporation acordó comprar la startup, que ha desarrollado un mini avión eVTOL durante la última década.
La situación de Lilium alimentó un debate en Alemania sobre si se estaba haciendo lo suficiente para apoyar a las nuevas empresas.
RC/WD (Reuters, AFP)