El viernes se anunciaron las 67 nominaciones anuales a los premios Grammy, lo que marcó el comienzo de una mezcla de triunfos, sorpresas y exclusiones notables. Si bien la Academia de la Grabación reconoció a algunas de las estrellas más importantes del año, hubo omisiones flagrantes y asentimientos inesperados que dejaron a los fanáticos y críticos rascándose la cabeza. Aquí hay un desglose de los mayores desaires, sorpresas y errores de la lista de nominaciones de este año.
Desaires: ¿Quién quedó fuera?
Una de las ausencias más llamativas de este año fue la exclusión total de los actos de K-pop. A pesar de la creciente influencia global del género, ningún artista de K-pop recibió una nominación en las categorías principales. Los fanáticos esperaban ver actos como BTS, Lisa de BLACKPINK, Stray Kids y SEVENTEEN reconocidos, especialmente considerando sus álbumes que encabezan las listas y sus actuaciones innovadoras. Lisa de BLACKPINK incluso había presentado su tema New Woman como Grabación del año y Canción del año, mientras que Stray Kids esperaba conseguir nominaciones para Ate y Chk Chk Boom. Sin embargo, no sólo faltaron en las nominaciones, sino que sólo dos nombres del K-pop fueron mencionados brevemente en el contexto de las colaboraciones.
Para los fanáticos del K-pop, esto se siente como un desaire familiar por parte de los Grammy, que han sido acusados de pasar por alto a los artistas asiáticos a pesar de su éxito comercial. Incluso BTS, que sigue siendo el único grupo de K-pop que recibe nominaciones directas al Grammy, aún no ha ganado un Grammy a pesar de su inmensa popularidad. Con los ojos de la industria puestos en ellos, 2025 parecía una excelente oportunidad para que los Grammy finalmente reconocieran el género de manera más sustancial, pero una vez más, el K-pop quedó de lado.
Tyla, la artista que combina géneros y que causó sensación con su éxito mundial Water, también quedó excluida en 2025. Después de llevarse a casa un Grammy el año pasado a la Mejor Interpretación de Música Africana, muchos esperaban que su álbum debut Tyla hiciera lo mismo. El álbum, que obtuvo elogios de la crítica y superó los mil millones de reproducciones, debería haber sido un contendiente para múltiples categorías, incluyendo Mejor Interpretación de R&B o Pop por temas como Truth or Dare y Art. A pesar de su enorme impacto en la escena musical mundial, Tyla no defenderá su título este año, una oportunidad perdida para que los Grammy reconozcan la creciente influencia de los artistas africanos en el panorama pop mundial.
- La continua ausencia de Renee Rapp
Reneé Rapp, una estrella en ascenso entre los artistas de la Generación Z, fue otro desaire notable. Después de causar sensación con su álbum debut Snow Angel y protagonizar la adaptación cinematográfica de Mean Girls, Rapp parecía segura para Mejor Artista Nuevo. Sin embargo, fue excluida por segundo año consecutivo. En cambio, en su lugar fueron nominados recién llegados como Benson Boone y Teddy Swims, que carecen del mismo nivel de impacto cultural.
Sorpresas: Los nominados inesperados
- El álbum cargado de flautas de Andre 3000
Una de las mayores sorpresas fue la inclusión de Andre 3000 en la categoría Álbum del Año. El ex miembro de OutKast, que ha estado prácticamente ausente del ojo público en los últimos años, lanzó New Blue Sun, un álbum de 87 minutos centrado casi exclusivamente en la flauta. Si bien esta elección sorprendió a muchos, también hizo una declaración sobre la versatilidad de Andre y su negativa a quedar encerrado en un género. Con solo un puñado de nominados masculinos en esta categoría, su presencia junto a pesos pesados como Beyoncé, Billie Eilish y Taylor Swift se sintió inesperada, pero totalmente apropiada para un artista de su talla.
- El reconocimiento continuo de Jacob Collier
Otra sorpresa llegó de la mano de Jacob Collier, el cantante y productor británico que consiguió una nominación por Djesse Vol. 4. Si bien Collier es una figura conocida en el mundo de la música, su nominación se sintió algo inesperada, dado el atractivo de nicho del álbum. Sin embargo, sus estrechos vínculos con el fallecido legendario productor Quincy Jones pueden haber influido en su continuo éxito en los Grammy.
- El gran año de Sabrina Carpenter
Sabrina Carpenter, quien fue desairada polémicamente el año pasado como Mejor Artista Nuevo, hizo un regreso importante este año, consiguiendo múltiples nominaciones en las categorías de los «Cuatro Grandes». Con su álbum número uno Short n’ Sweet y varias canciones exitosas, la cantante ha demostrado ser una fuerza en la industria musical.
Pasos en falso: las nominaciones al Grammy que no aterrizaron del todo
- Taylor Swift Quincena en Grabación del Año
Si bien The Tortured Poets Department de Taylor Swift es un candidato digno de Álbum del Año, su tema Fortnight no debería haber sido nominado a Grabación del Año. Si bien fue un éxito en las listas de éxitos, su impacto en el panorama pop general se sintió apagado en comparación con otros contendientes en la categoría. En un año lleno de temas destacados, Fortnight careció de resonancia para justificar su inclusión en esta prestigiosa categoría. En cambio, temas de artistas como Shaboozey o Tinashe podrían haber sido opciones más apropiadas.
- La exclusión de Ariana Grande de las categorías principales
Ariana Grande, a pesar de lanzar su bien recibido álbum Eternal Sunshine, fue sorprendentemente excluida de categorías importantes como Álbum del año y Grabación del año. Eternal Sunshine no pasó el corte en las categorías más prestigiosas. Lo que es más sorprendente es que We Can’t Be Friends (Wait for Your Love), un himno del álbum, no fue nominado ni a Canción del Año ni a Grabación del Año.