Los líderes de Brasil y Cuba cancelaron su asistencia a la cumbre BRICS de esta semana, que será organizada en Rusia por el presidente Vladimir Putin.
«Lamentablemente, como se supo hoy, el presidente de Brasil, Lula da Silva, y el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, no podrán venir debido a circunstancias imprevistas», dijo el asesor presidencial del Kremlin, Yury Ushakov, en comentarios reportados por los medios estatales rusos en octubre. 21.
Se informa que Lula, de 78 años, sufrió un hemorragia cerebral menor tras caerse en su casa el fin de semana, y en su lugar comparecerá por videoconferencia.
Díaz-Canel sufre «graves problemas energéticos», informaron medios estatales rusos.
Los BRICS, compuestos por Rusia, China, India, Brasil y otras naciones, son un grupo de economías emergentes que a menudo se presentan como un contrapeso al mundo liderado por Occidente.
Cuatro nuevos miembros (Egipto, Etiopía, Irán y los Emiratos Árabes Unidos) se unieron a la organización internacional a principios de 2024. Esto marcó la primera expansión del grupo desde diciembre de 2010, cuando Sudáfrica se convirtió en miembro.
Cuba solicitó unirse al grupo BRICS como «país socio» en una carta oficial al presidente ruso Vladimir Putin, dijo un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano el 8 de octubre.
Con Rusia cada vez más aislada en el escenario internacional y obligada a recurrir a países como Corea del Norte en busca de apoyo, Moscú espera que la cumbre pueda enviar un mensaje a las naciones occidentales de que aún puede ejercer cierta influencia.
El Kremlin describió la reunión de tres días que comenzó el 22 de octubre como uno de los «eventos de política exterior de mayor escala jamás realizados» en Rusia.