Jessica Chastain y Anne Hathaway son dos de las mejores actrices de esta generación, capaces de elevar cada película que protagonizan. Anteriormente fueron elegidas juntas para Interstellar, de Christopher Nolan, aunque el diseño incrédulo de la película hizo que apenas estuvieran juntas en una escena. El instinto de madre de Benoît Delhomme, una nueva versión del thriller belga de 2018 de Olivier Masset-Depasse, afortunadamente no hace lo mismo. (Lea también: Mejores actuaciones actorales de 2024: De Fahadh Faasil en Aavesham a Kani Kusruti en All We Imagine As Light)
la premisa
Los dos actores interpretan a vecinos cuyas vidas se entrelazan con la culpa, la tragedia y las manipulaciones. La premisa lo tiene todo: campismo, vestuario y una espiral de melodrama. Pero, por desgracia, el resultado es una película demasiado soleada, demasiado dura y demasiado seria para su propio bien.
Celine (Anne Hathaway) y Alice (Jessica Chastain) son amas de casa suburbanas que se convierten en mejores amigas y comprenden los sueños y estados de ánimo de cada una como hermanas perdidas hace mucho tiempo. Alice se mantiene bien teniendo en cuenta lo delicada que era su condición en un momento dado, y Celine brinda su capaz apoyo: dos mujeres que comparten las alegrías y preocupaciones de la maternidad. Sus vidas perfectas se derrumban con la impactante muerte del hijo de Celine, Max (Baylen D Bielitz), quien se resbala y cae desde el balcón de su casa. Alice se culpa a sí misma y Celine ya no puede soportar enfrentarla.
Esta devastadora pérdida destroza el idilio doméstico de las vidas de Celine y Alice. El marido de Celine, Damian (Josh Charles), toma el biberón y su relación empeora un poco cada día que pasa. Su depresión amenaza con arruinar la fachada que los vecinos intentan levantar en los meses siguientes, incluso cuando Alice parece no entender cómo salvar a una amiga.
que funciona
Alice tiene sus propias ansiedades en el camino, que se vuelven más reales cuando se da cuenta de que Celine podría estar tramando algo mucho más siniestro detrás de esas miradas vacías. Su marido Simon (Anders Danielsen Lie) no le cree. ¿Está soñando despierta? ¿Puede ser esto real?
Mother’s Instinct tiene mucho potencial para ser uno de esos psicodramas cursis, muy entretenidos pero morbosos del año que lo convierten en una repetición perfecta. Sin embargo, la narración carece de matices y de buen ojo para los personajes. El tono, a menudo salpicado de marcos brillantemente iluminados de trajes de colores pastel, suena decididamente para llevar este melodrama a su potencial más pulposo.
Pensamientos finales
Jessica Chastain es maravillosa en la parte más bien ingrata y hace de la fragilidad de Alice su mayor arma. La aguda evaluación que Hathaway hace de Celine la iguala maravillosamente: una mujer que poco a poco va perdiendo el sentido de sí misma. Uno desearía que tuvieran la oportunidad de ser más teatrales con estos papeles; Estas mujeres tenían todos los elementos para hacer una crítica al estilo Joan Crawford-Bette Davis. Sin embargo, carece del instinto asesino de un thriller hitchcockiano.
Sin embargo, Mother’s Instinct consigue ser un melodrama voluntariamente seguro que asienta su polvo sin grandes problemas.
Mother’s Instinct ya está disponible para ver en Lionsgate Play.