Uganda levantó el sábado un bloqueo de dos meses en dos distritos en el epicentro de la epidemia de ébola del país, en medio de la cautelosa esperanza de que el brote pueda terminar pronto.
Desde que las autoridades declararon un brote de ébola el 20 de septiembre, la nación de África Oriental registró 142 casos confirmados y 56 muertes, y la enfermedad se propagó a la capital, Kampala.
Los dos distritos centrales en el corazón del brote, Mubende y Kassanda, fueron bloqueados por el presidente Yoweri Museveni el 15 de octubre.
Pero el sábado, la vicepresidenta Jessica Alupo anunció que el gobierno «levantaría todas las restricciones de movimiento y el toque de queda en los distritos de Mubende y Kassanda con efecto inmediato».
Los dos puntos críticos estaban bajo toque de queda desde el anochecer hasta el amanecer, con mercados, bares e iglesias cerrados, así como prohibidos los viajes personales.
«El levantamiento de las restricciones se basa en que actualmente no hay transmisión, no hay contacto bajo seguimiento, no hay pacientes en las instalaciones de aislamiento y estamos progresando bien», dijo Alupo en un discurso televisado pronunciado en nombre de Museveni.
Las autoridades de Uganda dijeron el mes pasado que los nuevos casos estaban disminuyendo y que el último paciente confirmado con la enfermedad fue dado de alta del hospital el 30 de noviembre.
Sin embargo, Alupa advirtió que el gobierno permanece en «alerta máxima» ante cualquier resurgimiento de los casos.
El anuncio se produjo después de que los líderes locales de los dos distritos apelaron el mes pasado para que se levantara el bloqueo e imploraron al gobierno central que brinde ayuda a los ciudadanos afectados por las restricciones a los negocios.
El brote ha sido causado por la cepa Sudán del virus, para la cual actualmente no existe una vacuna.
Uganda recibió a principios de este mes su primer envío de vacunas de prueba contra la cepa de Sudán, y se esperan más dosis en las próximas semanas.
Se utilizarán en un llamado ensayo de vacunación en anillo, donde todos los contactos de pacientes con ébola confirmados y los contactos de los contactos se inyectan junto con los trabajadores de salud y de primera línea.
Sin embargo, la ausencia de casos activos de ébola en los últimos días ha retrasado los ensayos de la vacuna, según expertos internacionales en salud que trabajan en Uganda.
Según la Organización Mundial de la Salud, un brote de la enfermedad termina cuando no hay nuevos casos durante 42 días consecutivos, el doble del período de incubación del ébola.
El ébola se propaga a través de los fluidos corporales. Los síntomas comunes son fiebre, vómitos, sangrado y diarrea.
Los brotes son difíciles de contener, especialmente en entornos urbanos.