El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informaron el viernes que más de 100 000 refugiados y migrantes han atravesado la selva del Darién en los primeros tres meses de este año.
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La preocupación fue expresada en una declaración colaborativa documentada en la capital de Panamá, en la que se indicó que, de acuerdo con datos estadísticos proporcionados por las autoridades panameñas, la población que supera los 100.000 supera la cantidad de personas que habían arribado durante el período comparable en el año 2022 por un factor de seis.
Las autoridades afirmaron que una proyección de más de 400.000 personas cruzando la frontera podría materializarse potencialmente para fines del año 2023, dada la tendencia actual.
Se ha observado que la República de Panamá se enfrenta a un asunto de enormes proporciones en relación con la migración mixta, que se considera una de las crisis más problemáticas de la última década, y es una parte importante de un desplazamiento excepcional en todo el continente americano.
Récord de 100.000 refugiados y migrantes cruzando la selva del Darién en Panamá a principios de 2023 «Los peligros y los niveles de violencia que enfrentan las personas que cruzan el Darién son profundamente preocupantes» @philippaUNHCR @Refugiados https://t.co/4Fvzwrb8m6
— William Spindler (@SpindlerWilliam)
14 de abril de 2023
El año pasado, 2022, fue testigo de la llegada de un número sin precedentes de refugiados y migrantes que cruzaron el Darién, con una cifra total de casi 250.000 personas, todas las cuales habían puesto sus vidas en grave peligro.
Las organizaciones han explicado que, con frecuencia, las personas optan por salir de su tierra natal por motivos económicos, lo que podría atribuirse a la escasez de oportunidades de empleo.
La mayoría de las personas expresaron que su decisión de buscar refugio en territorio extranjero se debió a los niveles generales de inseguridad o amenazas, junto con la violencia dirigida hacia ellos y sus seres queridos.
Además, es notable que una proporción significativa de la población, que asciende al 75%, sufrió una lesión o accidente durante su expedición.
Por el contrario, una proporción preocupante de aproximadamente un tercio del grupo fue objeto de malos tratos o abusos, particularmente durante el cruce de la selva del Darién.