Los residentes de Tel Aviv expresaron emociones encontradas después de que se declarara un alto el fuego en el conflicto entre Israel y Hamas. La liberación de los rehenes ha traído esperanza, pero algunos siguen en cautiverio.
Los residentes de Tel Aviv se despertaron el lunes con sentimientos encontrados después de que el alto el fuego que entró en vigor el domingo por la mañana despertó modestas esperanzas de poner fin a la guerra entre Israel y Hamas.
La alegría de ver a los rehenes liberados Emily Damari, Romi Gonen y Doron Steinbrecher reunidos con sus familias se vio atenuada por importantes interrogantes sobre el destino de los casi 100 otros secuestrados durante el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que permanecen cautivos en Gaza.
«Los sentimientos son encontrados porque todo el pueblo de Israel y yo hemos pasado por un momento muy difícil, y nuestro corazón todavía llora por todos los heridos y mártires que perdieron la vida por el regreso de los rehenes, por la tal vez por la existencia del país», dijo Ora Golan, residente de Tel Aviv.
Damari, Gonen y Steinbrecher fueron los primeros entre 33 rehenes israelíes que serán liberados en las próximas seis semanas en un acuerdo que incluye una pausa en los combates, la liberación de casi 2.000 prisioneros palestinos y mayores entregas de combustible y ayuda a Gaza.
Lo que sucederá después de la primera fase de 42 días del acuerdo aún es incierto.
Las etapas posteriores del acuerdo exigen una mayor liberación de rehenes y prisioneros y el fin permanente de la guerra.
«Un gran orgullo, una gran alegría, junto con el dolor y la esperanza de que este sea un comienzo para que todos regresen, sin dejar a nadie atrás», dijo Yafa Twito, otro residente de Tel Aviv. «Sólo si recuperamos a todos sabremos que este es nuestro país, que este es el país que al menos soñé, sin dejar a nadie atrás», añadió.
Pero el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que fue presionado por la administración saliente de Biden y el presidente entrante, Trump, para lograr un acuerdo antes de la toma de posesión del presidente electo el lunes en Washington, ha dicho que recibió garantías de Trump de que Israel podría continuar luchando contra Hamas si fuera necesario.
El número de víctimas de la guerra ha sido asombroso, mientras que nuevos detalles sobre su escala e impacto surgirán tras el cese de los combates.
La guerra ha matado a más de 46.000 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, que dice que las mujeres y los niños representan más de la mitad de las muertes, pero no distingue entre civiles y combatientes.
Está previsto que el sábado se liberen más rehenes y prisioneros, mientras que en poco más de dos semanas comenzarán las conversaciones sobre la segunda fase, mucho más complicada, del acuerdo de alto el fuego.