Bangladesh está tratando de diversificar su política exterior y reducir su dependencia de la India uniéndose a la ASEAN, aunque las perspectivas de que Dhaka sea un nuevo miembro del bloque regional son poco probables por ahora, según los observadores, ya que continúa lidiando con el impacto de la caída de la ex primera ministra Sheikh Hasina.
Otros analistas, sin embargo, dicen que la experiencia de Bangladesh en arbitraje marítimo internacional y sus vínculos culturales con la región podrían favorecer su aplicación.
El miércoles pasado, el principal asesor del gobierno interino de Bangladesh, Muhammad Yunus, buscó el apoyo de Malasia para su intento de unirse a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, integrada por 10 miembros.
Planteó la cuestión durante una reunión en Dacca con el Alto Comisionado de Malasia, Haznah Md Hashim, quien dijo que su país –presidente de la ASEAN el año que viene– transmitiría la solicitud de Yunus.
Yunus, de 84 años, regresó de Francia a Bangladesh el mes pasado para asumir la monumental tarea de dirigir las reformas democráticas y restablecer la estabilidad en el país azotado por la crisis. Su nombramiento se produjo después de que Hasina, de 76 años, huyera del país a la India el 5 de agosto en helicóptero después de que una revolución liderada por estudiantes derrocara su régimen de mano dura de 15 años.