Los drones fueron diseñados originalmente para misiones de reconocimiento y vigilancia en el campo de batalla.
“El instituto está en proceso de personalizar los drones, algunos de ellos equipados con el sistema de objetivos láser y otros con el sistema de municiones”, dijo la CNA citando a una fuente militar no identificada.
La fuente dijo que el sistema láser permitiría a los operadores bloquear con precisión los objetivos y transmitir las coordenadas a una base militar.
Un dron con el sistema de municiones podría responder a ataques inesperados durante una misión de reconocimiento arrojando hasta ocho rondas de morteros de 60 mm, según la fuente.
Los drones, que serán utilizados por unidades de combate conjuntas para reconocimiento urbano y cercano al mar, tienen un tiempo de vuelo de hasta 60 minutos y una distancia de control remoto de hasta 30 km (18,6 millas).
Mientras tanto, dos prototipos de una nueva variante del Leopardo longibando Se están probando vehículos blindados y hasta ahora los resultados han superado los requisitos estándar, dijo el lunes el Ministerio de Defensa.
“La prueba operativa inicial y la evaluación de los dos prototipos están en marcha y se espera que se completen en octubre”, dijo el comunicado, y agregó que los vehículos entrarían en producción en masa tan pronto como pasaran las pruebas finales.
La Oficina de Armamentos de Taiwán está desarrollando un proyecto de 769 millones de dólares taiwaneses destinado a aumentar la fuerza de la infantería de la isla con mayor potencia de fuego y capacidades de ataque rápido.
El vehículo blindado de ocho ruedas tiene un cañón de 105 mm, una ametralladora coaxial de 7,62 mm y una estación de armas remota con una ametralladora de 12,7 mm, según la oficina.
Taiwán ha estado ansioso por demostrar su determinación de defenderse en caso de que Beijing, que reclama la soberanía sobre la isla autónoma y ha prometido tomar el control de ella, por la fuerza si es necesario, alguna vez ataque.
Ha aumentado la preocupación por la posibilidad de que estalle un conflicto en el Estrecho de Taiwán desde el Ejército Popular de Liberación realizaron simulacros de fuego real sin precedentes en toda la isla después de nancy pelosi – entonces presidente de la Cámara de Representantes de EE. UU. – visitó Taipei en agosto pasado. El viaje fue visto por Beijing como una violación de su soberanía.
Estados Unidos ha seguido siendo un firme partidario de Taiwán y su mayor proveedor de armas a pesar de la ausencia de vínculos formales. La mayoría de los países, incluido EE. UU., no reconocen a Taiwán como un estado independiente, pero se oponen a un cambio de statu quo por la fuerza.